Farmacia y Parafarmacia

Al finalizar el ciclo formativo de FP en farmacia y parafarmacia, se obtiene el título de Técnico en Farmacia y Parafarmacia, un CFGM (Ciclo Formativo de Grado Medio) reconocido en el sector sanitario. Este título habilita para trabajar en farmacias, parafarmacias, laboratorios y almacenes de medicamentos, proporcionando una sólida base para impulsar tu carrera en el ámbito de la salud y el bienestar.

Para acceder a la FP en farmacia y parafarmacia, necesitas cumplir con uno de los siguientes requisitos: tener el título de ESO, superar la prueba de acceso a grado medio, o haber superado la prueba de acceso a la universidad para mayores de 25 años. Estas vías de acceso están diseñadas para facilitar la incorporación de estudiantes con diferentes trayectorias académicas a esta formación profesional, abriendo puertas a una carrera en el sector farmacéutico y de la salud.

Los técnicos en FP farmacia y parafarmacia disfrutan de variadas oportunidades laborales en el sector salud. Pueden ejercer en farmacias y parafarmacias, apoyando en la dispensación y venta de productos. También tienen cabida en almacenes de medicamentos, laboratorios de análisis clínicos y empresas de cosmética, ampliando sus horizontes profesionales y contribuyendo significativamente al bienestar de la comunidad.

El perfil profesional de un auxiliar de farmacia graduado en iFP incluye competencias en la dispensación y venta de productos farmacéuticos y parafarmacéuticos, gestión de stocks, y atención al cliente con orientación sanitaria. Este perfil se caracteriza por su capacidad para trabajar en equipo, conocimientos actualizados sobre productos de farmacia y parafarmacia, y habilidades en la gestión eficiente de los recursos de la farmacia, preparándolos para contribuir activamente al sector de la salud y el bienestar.

Sí, existen convenios de colaboración con empresas del sector farmacéutico para que los estudiantes de FP en farmacia realicen prácticas formativas. Estas alianzas permiten aplicar los conocimientos adquiridos en entornos reales de trabajo, facilitando la adquisición de experiencia profesional y el desarrollo de habilidades específicas del ámbito farmacéutico. Estas prácticas son un pilar fundamental para mejorar la empleabilidad de los graduados, acercándolos a las dinámicas y necesidades actuales del sector.